Buscar este blog

viernes, 23 de noviembre de 2012

NO ESTAMOS SOLAS

Parece que esto del cáncer de mama es una epidemia. 

Desde que me lo detectaron a mí, he podido comprobar que el índice de casos es enorme. Desde el 16 de junio de 2011, día en el que me confirmaron que tenía un carcinoma, junto a mí y detrás de mí vinieron unas cuantas: Vero, MªJo, Ana, Clara, Carmen, Pili y Cris... Estoy segura de que me estoy olvidando a alguna, pero la cuestión es que tengo muchos casos a mi alrededor. Eso sin contar con todas las que pasaron por este trance ANTES que yo...

Esto no es para que dramaticemos. Es, simplemente, para volver a hacer una llamada a la conciencia social. El cáncer, sobre todo el de mama, no tiene que ser sinónimo de muerte. Todo lo contrario, tiene que ser sinónimo de vida. El día en que te diagnostican una enfermedad grave te cambia la vida para mejor. Se marca un antes y un después a tu vida y a los de tu alrededor. Dejas de preocuparte de tonterías y aprendes a valorar lo que realmente importa: tu familia, tus seres queridos y tu propia existencia. Todo lo demás es secundario. 

En los momentos duros como los que pasa una persona a la que se diagnostica un cáncer -o cualquier otra enfermedad grave-, es cuando puedes llegar a palpar la bondad del ser humano. Y la maldad... pero ésta última mejor obviarla, ya que sale de tí una fuerza interior que te hace ser capaz de "puentear" esa maldad para agarrarte a lo bueno, que es mucho más que lo malo... Lo que pasa es que lo malo es más escandaloso.

De todos modos, y a pesar de esa bondad, la enfermedad la tienes que pasar tú sola. Tú eres la que te enfrentas a la enfermedad, tú eres la que vence al cáncer, y tú eres la que tienes la capacidad de ver las cosas con aceptación y optimismo. No obstante, cuando ves a tus hijos y a tu familia a tu alrededor con toda la naturalidad del mundo, te das cuenta de lo importante que eres para ellos y lo que te quieren por lo que realmente eres: su madre, hija, nuera, esposa, tía o sobrina. Eres tú y no otra... y por qué no decirlo, también te sientes HIJA DE UN DIOS que te ha creado y que permite tu sufrimiento por alguna razón que desconocemos.

Hace unos días me pasaron este enlace que pongo a continuación. Esta chica se llama Raquel,  no la conozco personalmente pero simplemente al ver el vídeo me ha parecido una heroína. Ser capaz de "exhibirte" de esa manera es, en mi modesta opinión, una lección de bondad sin límites. Y ¡¡¡qué mono le queda ese pañuelo con esa flor tan bonita!!!!

http://www.youtube.com/watch?v=Go2Hoo5nxDs&feature=youtube_gdata_player

2 comentarios: